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Sus manos llegan hasta su vagina, los dedos acariciando sus labios mojados, apoyándolos suavemente contra la entrada, apretando apenas.
Ella recorre su pene con la lengua, de la base a la punta, sus manos acariciando sus testículos, apretando suavemente y con pasión, sacándole pequeños gritos de gozo
Ella sigue mamando de su pene como fascinada, lamiéndolo, degustándolo. El moja sus manos con su humedad, y de repente sin aviso, introduce dos dedos en ella. Un gemido fuerte y lleno de placer escapa de sus labios.
Ella suelta su pene, envuelto en saliva, mirándolo a los ojos lo coloca entre sus pechos, el solo puede sonreír mientras siente la fricción entre el pene y las tetas. El se muerde los labios mientras su pelvis se mueve como con mente propia.
Ella aprieta sus pechos, sacándole gemidos mientras su corazón late con fuerza. Sus ojos apenas creen lo que ven, una mujer hermosa, usando sus pechos para darle placer de forma única, cumpliendo una de sus fantasías.
El sigue explorando su vagina ardiente, mojada, sus dedos entrando y saliendo. Acariciando su clítoris en movimientos de círculo.
Ella usa sus pezones erectos para hacerle cosquillas al pene, luego lo envuelve entre sus pechos hasta hacerlo desaparecer.
El hombre se estremece, y unas gotitas de líquido pre seminal aparecen en la punta del pene. Ella lo toma entre sus manos: “Para mi!” dice ella, succionándolo con fuerza, entre sorprendido y lleno de placer el solo puede gritar el nombre de ella. Su boca arde, mientras lo chupa y lame, dejándolo seco.
El se estremece, una mano hecha un puño sobre las sabanas, la otra empujando sus dedos mas dentro de ella, haciéndola gemir.
"Ya basta de juegos" dice ella, girando en la cama hasta darle la espalda, su cola blanca, su vagina brillante de humedad quedan frente a el. Girando un poco para mirarlo ella dice una palabra: “Cogeme” susurra.
El se queda mirándola, ardiendo en deseo, solo puede asentir sin palabras.
Se sitúa detrás de ella, su pene erecto apuntándola, tomando su cadera en sus manos. Moviéndose lentamente hacia delante, hasta que la punta del pene la toca. Con su mano lo frota contra la vagina, moviéndolo sobre los labios, mojándolo, rozando el clítoris con la punta.
El se desliza en ella, un movimiento suave y muy duro al mismo tiempo, un sonoro sonido se oye cuando su pelvis choca contra sus nalgas. Ambos sueltan gemidos de gozo.
Ella impone el ritmo al principio, respondiendo a sus embestidas el toma sus pechos oscilantes con las manos. Apretándolos suavemente mientras aumenta el ritmo, ella gime de placer y su respiración se agita.
Ella aprieta la cola y el se mueve mas rápido, empujándola con todo el cuerpo. Sus corazones latiendo con fuerza, golpeando sus pechos. El pene de el se endurece aun mas dentro de ella.
Su vagina lo atrapa, lo envuelve de calor y gozo, el ritmo de la pasión aumenta.
Ella gime a través de labios apretados, su voz apenas un ronroneo:
“Dame con todo y me haces acabar!”
El se lanza sobre ella, tomándola de los hombros y penetrándola rápido y fuerte, enterrando su pene en su creciente calor. Como un semental montando una yegua en celo.
....continuara......